Representación antropomorfa de un cemí acuclillado, con las piernas separadas, los brazos en ajorcas separados del cuerpo por una perforación, y el ombligo. El rostro lleva ojos en forma de cuenca vacía, nariz, la boca a manera de ranura profunda, así como las orejas. Coronando la cabeza se observa un tocado. En la parte posterior y en la nuca una perforación bicónica para ser atada la pieza y colgarla, además los glúteos trabajados como un detalle singular. Presenta un color verde.